por ¿Alguna vez has escuchado a alguien decir ‘te echaron mal de ojo’? Consiste de una creencia popular, basada en la superstición, en que una persona a través de una mirada puede infligir daños a otros. Los que creen firmemente en las prácticas de magia blanca, magia negra y hechicería, aseguran que manipular las fuerzas y energías es posible siguiendo los pasos correctos. Mientras que otros abrazan el escepticismo y rechazan por completo todo sobre el mal de ojo o los amarres de amor.
Sea como sea, es un teorema interesante que vale la pena tratar, y si estás intrigado sobre lo que es el mal de ojo, cómo funciona o como puedes protegerte: presta atención, porque esto es para ti. Desglosaremos a detalle una de los métodos de hacer daño más comunes de la historia, que a veces se hace con mala intención, afecta principalmente a los niños y bebés, y que ha revolucionado por completo las creencias personales.
Algunas culturas se han centrado en el ojo maligno y buscan el significado al respecto. Desde cuáles son los materiales para evitar ser maldecido mediante una mirada, hasta identificar los síntomas temprano antes de que sea demasiado tarde. Porque sí, entre algunos de los peligros que se le asocia al ojo maligno es la muerte.
¿Deseas adquirir los conocimientos suficientes sobre la mirada maligna y cómo perjudica el día a día de las personas? ¿Notas que alguien está viendo demasiado a su bebé? ¡Acompáñanos hasta el final del artículo para desempolvar todo lo que el mal de ojo tiene guardado para nosotros! ¡Vamos por ello!
¿Qué es el mal de ojo?
El mal de ojo es el término que se le adjudica a la práctica, voluntaria e involuntaria, que ocurre cuando una persona se ve afectada por la mirada y las malas influencias. Usualmente, es visto como pura superstición, o forma parte de la liturgia mágica. Su origen, por otro lado, viene desde mucho tiempo atrás. En los que se realizaban rituales para dañar y evocar deidades, demonios y fantasmas de energías extraordinarias.
En cuestión, la forma en que se produce el ‘mal de ojo’ es sencillo. Un ojeador, mediante la mirada intensa, produce daño a otra ya sea por la transferencia de negatividad, malas vibras o maldiciones. De hecho, suele ser relacionado con la envidia y el odio interno.
Por lo que si, por ejemplo, consigues algo bueno laboralmente, y un compañero te queda viendo mucho, con odio, puede echarte la brujería sin siquiera pensarlo. Ya que todos esos sentimientos se transfieren y lo recibe una persona que no tiene ningún tipo de protección.
¿Qué causa el mal de ojo?
Aunque se manifiesta mediante las energías negativas y las ganas de provocar dolor en otros, tiene sus fuentes de evocación. La intensidad dependerá de cuánto desea una persona dañarte o cuánto te envidia, pero las causas suelen ser las siguientes:
Pensamientos involuntarios
La mirada maligna, como hemos venido señalando, no siempre ocurre porque te quieren hacer daño. Sino que inconscientemente, alguien plasma esas energías al desear tener la misma salud de un niño o un adulto, los logros de un amigo, el amor de un compañero, y así sucesivamente. Por lo que se considera una forma sutil, pero efectiva, causar el ojo maligno.
Envidia
La envidia suele ser la causa principal del mal de ojo, ya sea por el deseo de ser una persona, obtener el mismo éxito, o siempre andar en una competencia. Es usual ver este tipo de manifestación en eventos de competición, en el que un participante sufre una caída o una lesión.
Rituales de magia negra
La magia negra son prácticas que buscan alterar el orden de los acontecimientos e influir en las energías negativas con la finalidad de hacerte daño. Mediante rituales, las personas son consciente de hacer daño y utilizan los materiales necesarios para infligir dolor.
¿Cuáles son los síntomas del mal de ojo?
Antes de decirte cómo identificar el ojo maligno, resulta pertinente aclarar que, aunque es más común en los niños y bebés, cualquier persona puede verse afectada por las malas influencias y los fenómenos del ‘ojo malvado’.
En el mismo orden de ideas, se puede transmitir las malas vibras con la respiración y los pensamientos. Una persona que fija la mirada en ti, y piensa solo en cosas malas, es capaz de transformar toda esa energía en daño e infligir dolor en los que no tienen cómo protegerse de la envidia de terceros.
En cuanto a los síntomas del mal de ojo, son los siguientes:
- Dolor. Si te sientes adolorido de repente, en lugares donde no te has golpeado, puedes que estés sufriendo de esta brujería.
- Pérdida del apetito. Si te encuentras en buena estado de salud, pero no te da nada de hambre, y tienes problemas para ingerir los alimentos, puede que sea una señal del ojo malvado.
- Llanto incontrolable en niños. Los bebés suelen manifestar las señales mediante un llanto desconsolado sin razón alguna.
Cómo curar el mal de ojo
Curar el ojo malvado una vez que es identificado es tarea fácil, solo preocúpate por conseguir los materiales necesarios. Una de esas formas incluye sal marina. Bastará con rociar el cuarto en los rincones y alrededores de la cama con la sal para que los síntomas se disipen.
Otra forma popular de curar el mal de ojo es dibujar una cruz en la frente y rezar oraciones y salmos de protección contra las malas influencias de terceros. Elige la que mejor te parezca y piensa en entidades religiosas con las que te sientas cómoda.
Por último, para los bebés, puedes optar por colocarle en la muñeca derecha una cinta roja. Esto le irá quitando paulatinamente las energías negativas de su cuerpo y lo hará más fuerte en el proceso.
Cómo protegerse del mal de ojo
Para protegerse de la mirada maligna debes comprar amuletos de distintas culturas que resultan efectivas contra la manifestación de magia negra. Uno de los más conocidos es el ojo azul turco, una especie de artefacto que te protege de las energías evocadas esta acción. Lo puedes llevar colgado o colocarlo en un lugar en específico.
Otros, en la misma sintonía de protección, aconsejan frotarse un huevo por todo el cuerpo de la persona afectada con la finalidad de que el alimento se lleve consigo todas las malas vibras. Por último, rituales de purificación de chakras, baños con agua bendita, santiguarse, hacer la primera comunión, hechizos de magia blanca, también son opciones a tener en cuenta para disipar el mal de ojo.
