La historia del Tarot es uno de los grandes secretos de las disciplinas esotéricas. Con mucho misterio involucrado, la adivinación mediante el mazo de cartas es una actividad que se relaciona con la magia, los hechizos y las almas en pena que se quedan atrapadas en el limbo de la vida.
A diferencia de otras alternativas de adivinación, el Tarot necesita de diversos catalizadores para poder invocar a un espíritu. También para conectarse a la energía que fluye entre todos nosotros. Se necesita de una interpretación por parte de los tarotista y sus asimilados.
Pero, ¿dónde inició el Tarot? ¿qué es realmente? y finalmente, ¿cuál es su relación con las almas en pena? Esas, y más preguntas, serás respondidas en el siguiente artículo. Ahondaremos en los secretos mejores guardados de una actividad oscura como la adivinación mediante el Tarot, escondidos en libros de ocultismo.
¿Cuál es la historia del Tarot?
La verdad es que la historia del Tarot no está del todo clara. Algunos asumen que su origen es egipcio, debido a que los arcanos mayores y el simbolismo de las cartas tienen alusiones a la cultura egipcia, en especial a uno de sus reyes, que es de donde viene su nombre.
También hay expertos que afirman que las cartas del Tarot pertenecen a un antiguo libro que sobrevivió de los incendios de la más longeva biblioteca de la sociedad egipcia. De hecho, alegan que los jeroglíficos fueron incorporados a las cartas, en especial los arcanos mayores.
Sin embargo, como práctica de adivinación y ocultismo, diversos autores trazan el origen a Europa en finales del siglo XIV. Las calles empezaron a comerciar las primeras cartas que se usaban para entretenimiento y entre los artistas locales para impresionar a un público en concreto.
Posteriormente, surgió la figura de los primeros hechiceros y brujos, quienes vestían con una indumentaria extrovertida, de colores, con bastones y acompañados de artilugios poco usuales. Cosas que, a día de hoy, algunos mantienen.
No fue hasta el siglo XVIII que las personas empezaron a relacionar a las cartas pintadas del Tarot como una actividad de adivinación esotérica. Tanto en Italia, como en Francia, surgieron las primeras mujeres prestando servicios para fines adivinatorios, dando comienzo a lo que, actualmente, conocemos como interpretación de las cartas del tarot.
¿Qué es el Tarot?
El tarot es un medio de adivinación mediante un mazo de cartas divididos en dos pendientes: los arcanos mayores y los arcanos menores. Representan todas historias fantásticas y terroríficas que vemos usualmente en la televisión pero que, para algunos, es completamente real y funciona a la perfección. Mientras que la ciencia se mantiene alejado y no da crédito.
Con el tarot se puede consultar e interpretar hechos que ocurrieron en el pasado, se están desenvolviendo en el presente o que pasarán en el futuro. El método de adivinación es mediante las preguntas y dependiendo de las cartas echadas, se realiza una comprensión de los sueños, emociones y percepciones de la persona. Tal como se indica en el Tarot de Aleister Crowley.
¿Cómo es el mazo de cartas?
En algunos países cambia el mazo de las cartas del Tarot, pero por lo general está constituido por una baraja de 78 cartas divididas en arcanos mayores y arcanos menores. Específicamente, 22 arcanos mayores, que se conocen como entidades por encima de todo, y 56 arcanos menores que representan las figuras medievales, como el rey, la reina y los caballeros.
Estas cartas deben diferenciarse de los ‘naipes’, que son las que se utilizan para algunos juegos como el Poker. Dichos naipes no suelen funcionar porque no involucran el simbolismo necesario para la adivinación, tampoco se puede hacer una interpretación fidedigna de los hechos mediante la cartomancia. Aunque también hay que decir que existe mucha intuición personal en la lectura del Tarot.
¿Cómo funciona el Tarot?
El tarot, como mecanismo de adivinación, funciona con un sistema simple y que incluso ha sido incorporado a la web en los últimos años. Consiste en que, la persona interesada en la videncia de las cartas, tiene que hacer una pregunta. Posteriormente, la persona ‘echa’ las cartas en la mesa de forma aleatoria.
Dependiendo de los arcanos que salgan, la persona detrás de las cartas o la mesa donde ocurre la adivinación, suelta las respuestas a las interrogantes, teniendo en cuenta los hechos y las emociones involucradas al momento. Algunas personas afirman que con este medio se pueden leer los pensamientos, para hacer la videncia más creíble.
¿Se puede contactar las almas en pena con el tarot?
Los tarotista, que son las personas encargadas de interpretar las cartas del Tarot, utilizan energías y catalizadores para entrar en el flujo de los acontecimientos. De este modo, contactan con seres del más allá quienes prestan su energía para poder realizar las adivinaciones pertinentes.
Sin embargo, estos individuos no siempre son buenas entidades, a veces son seres malvados que pueden ejercer una fuerza en los videntes, como es el caso de las almas en pena. En términos sencillos, se cree que es posible contactar a las almas en pena mediante este método, aunque no es recomendable.
Funciona para que algunas personas contacten con sus seres queridos de los cuales no se pudieron despedir. El tarot es una disciplina oscura, con diversos matices que hay que tener en cuenta y no siempre es segura. Hay mucho simbolismo ligado a las cartas y el ambiente donde se suele realizar la adivinación alberga catalizadores.
¿Qué hay de cierto en Tarot?
No todas las personas ven con buenos ojos lo que ocurre en la historia del Tarot. Lo catalogan de fraude y se burlan de los acontecimientos relacionados con su práctica. Sin embargo, los aficionados y los amantes del ocultismo afirman que las cosas que suceden en el tarot son reales, y tiene sus bases en las diversas disciplinas esotéricas, como la invocación de los entes paranormales.
El tarot, aunque interpreta hechos que van a ocurrir en el futuro, en realidad no le da relevancia a un camino en concreto, sino que ilumina a las personas por las opciones que tiene para elegir. Puede ser visto como un medio de orientación o una alternativa para solucionar los problemas. El resto dependerá de las personas y las decisiones que tome en las adversidades que se le presenten en la vida.