El I-Ching es la práctica de adivinación que se utiliza en China, pero que ya se ha expandido por todo el mundo, y suele ser normal verlo junto a otros sistemas de adivinación. El I-Ching es complejo, y hay que comprender los significados de sus figuras para interpretarlo con éxito. Pero si usted es de esas personas que quieren probarlo pero no entienden el significado del hexágono o las líneas, tiene saber que hay un método más fácil y sencillo, y es hacer una tirada con un dado.
Para sacarle la utilidad al dado como si estuviera haciéndolo con el hexágono del I-Ching, hay que hacerlo en varios procesos. Primeramente hay que realizar la pregunta sobre una cuestión que se quiera saber, y cual es la posible solución sobre el tema, y apuntarlo en un papel.
A continuación, tiramos el dado seis veces, y vaya anotando los números que vaya saliendo, de forma vertical, el primer número abajo, y el último arriba. Después escriba una línea, continua si es el número impar, y discontinua si es par.
Observamos qué líneas han salido en la parte superior del hexagrama, y las tres inferiores, cada una representará un triagrama. Tras esto, buscaremos el número correspondiente, y vemos que breve solución o interpretación nos hace el I-Ching sobre el problema preguntado. Hay que entender que estará hecho en clave filosófica, por lo que habrá que saber interpretarlo de pos al problema planteado.
Se toma ambas líneas y se busca a qué número corresponde esos dos triagramas juntos, y ya sólo deberá de hacer caso o tomar el consejo de la manera que usted crea necesaria.